Estructura de contenido
Valor Razonable, Determinación del Valor Razonable NIF B-7
En 2005 comenzó a regir la nueva normativa NIF B-7, que establece las pautas para reconocer el valor inicial, al momento de la adquisición, de los activos netos obtenidos en la compra de un negocio, en lugar de su creación, además de abordar conceptos como el fondo de comercio o adquisiciones a un valor por debajo del mercado.
La regulación distingue entre la compra de los activos que forman parte de un negocio y la adquisición de un conjunto de activos que no están operando como un negocio.
Según la norma, se propone que la valoración de la adquisición de los activos y pasivos del negocio comprado se realice al valor justo o específico en la fecha de la compra, de acuerdo con las políticas contables del comprador, se añade que esta práctica facilita la identificación del exceso en el pago o la ventaja en la compra a un precio inferior al valor de mercado.
La regulación establece que un negocio comprende un conjunto de actividades y activos, o activos netos, que están o pueden ser gestionados por un único centro de control, con el objetivo de generar rendimientos para sus propietarios, sin embargo, subraya que la adquisición de los activos y pasivos del negocio comprado debe realizarse a su valor justo.
Al considerar los pasivos del negocio adquirido en el reconocimiento de la compra, se le otorga al negocio una personalidad jurídica, lo que significa que asume el papel de la empresa propietaria que vende la entidad económica en la que opera el negocio y es responsable de saldar los pasivos asociados.
De acuerdo con decisiones de varios tribunales federales de justicia, se define a la entidad económica como el conjunto de activos capaces de generar bienes o servicios, sin tener personalidad jurídica propia. Por lo tanto, su valor no incluye activos circulantes ni pasivos, a excepción de los laborales, siempre y cuando no haya interrupción en la operación al cambiar de propietario; en caso de interrupción, se excluyen los pasivos laborales, la regulación no aborda un pasivo contingente común en hoteles y plantas industriales: el pasivo ecológico, que implica observaciones por parte de la PROFEPA o incumplimientos de normativas ambientales.
La norma NIF B-7 establece un criterio para calcular el valor razonable de los activos intangibles de un negocio, el cual implica estimar los flujos de ingresos futuros generados por su capacidad para generar ganancias. Este proceso requiere la utilización de diferentes suposiciones y estimaciones. Para determinar el valor justo de manera adecuada, es necesario tener en cuenta provisiones que se fundamenten en la probabilidad de eventos futuros que puedan generar costos adicionales para el adquirente.
La evaluación del valor justo del negocio debe tener en cuenta la información presente en los estados financieros relacionados con el efectivo y los valores realizables, así como con los activos como inmuebles, maquinaria y equipo, valorados según el costo de reemplazo de una capacidad de producción o servicio comparable, sin superar su valor de recuperación mediante la generación de flujos futuros.
¿Cuáles son los beneficios de la NIF B-7?
La NIF B-7 ofrece varias ventajas significativas en el ámbito contable y financiero:
- Claridad en el tratamiento de adquisiciones de negocios: Proporciona pautas claras para el reconocimiento inicial de activos y pasivos en las adquisiciones de negocios, lo que ayuda a mejorar la transparencia y la coherencia en los informes financieros.
2. Consideración del valor razonable: La norma requiere que los activos y pasivos adquiridos se valoren a su valor razonable en la fecha de adquisición, lo que refleja de manera más precisa su valor económico en el momento de la transacción.
3. Inclusión de activos intangibles: La NIF B-7 aborda el reconocimiento y valoración de los activos intangibles, como el fondo de comercio, mediante la estimación de flujos futuros y el uso de supuestos y estimaciones adecuadas.
4. Evaluación de provisiones futuras: La norma requiere la consideración de provisiones basadas en la probabilidad de eventos futuros que puedan generar costos adicionales para el adquirente, lo que ayuda a garantizar una evaluación más completa de los riesgos asociados con la adquisición.
5. Enfoque en la generación de flujos futuros: La determinación del valor razonable del negocio se basa en la capacidad de generar flujos futuros, lo que ayuda a alinear la valoración con las expectativas de desempeño futuro del negocio.
En resumen, la NIF B-7 proporciona un marco sólido y coherente para el reconocimiento y valoración de activos y pasivos en las adquisiciones de negocios, lo que contribuye a una presentación más precisa y transparente de la situación financiera de una entidad.
¿Qué es el valor razonable?
El valor razonable se determina considerando las condiciones del mercado y no representa un valor fijo para un activo o pasivo del Banco, mientras que para algunos activos y pasivos se pueden obtener datos del mercado, para otros esto no es posible, sin embargo, el objetivo de determinar el valor razonable es el mismo en ambos casos: estimar el precio al cual una transacción para vender el activo o transferir el pasivo ocurriría entre participantes del mercado en la fecha de valuación y bajo las condiciones actuales del mercado.
Por lo tanto, el valor razonable se basa en una operación real o una estimación de la misma, considerando las características del activo o pasivo y las circunstancias presentes en el momento de la valuación.
Cuando no es posible observar el precio de mercado de un activo o un pasivo idéntico, el Banco debe calcular el valor razonable mediante otras técnicas de valoración que aprovechen al máximo los datos relevantes disponibles y minimicen el uso de datos no observables, el valor razonable se basa en el mercado y utiliza supuestos que los participantes del mercado emplearían al fijar el precio de un activo o un pasivo, lo que incluye consideraciones sobre el riesgo, por lo tanto, la intención del Banco de mantener un activo o liquidar o satisfacer un pasivo no influye en la determinación del valor razonable.
